jueves, 28 de abril de 2011

Dos discursos

Ayer, 27 de abril de 2011, la escritora Ana María Matute vio reconocida su obra y dilatada labor como escritora con la concesión del Premio Cervantes. Es esta una buena oportunidad para conocer más sobre esta mujer entusiasmada por la literatura.

Os invitamos a escuchar su discurso, a descargároslo si queréis leerlo con calma y a conocer su "otro gran discurso", el de ingreso en 1998 en la Real Academia de la Lengua


Para saber más

sábado, 23 de abril de 2011

La emperatriz de los etéreos

"La emperatriz de los etéreos", es un buen libro de aventuras y fantasía de Laura Gallego García. Trata de una chica, que vive en un mundo helado, inerte, donde el mundo está sumido en un constante invierno que nunca acaba. Esto se debe, al dominio de La Emperatriz de los Etéreos, que tiene ese efecto sobre la tierra. Bipa, tendrá que realizar grandes proezas, esquivar grandes obstáculos, sobrevivir en su camino para poder llegar al palacio de la emperatriz, para poder salvar a su amigo Aer, que quiere convertirse en un etéreo. En su aventura, se encontrará con personas muy diversas, que la intentarán ayudar, o al contrario. En el último momento, en el que Aer estaría a punto de convertirse en un etéreo (invisible), le salvará, y conseguirá que en su mundo, vuelva a brillar el sol. Si deseas saberlo todo sobre esta apasionante aventura, visita esta página: ·La Emperatriz de los etéreos (página oficial).
El Curioso

sábado, 2 de abril de 2011

Saber decir

Adela Cortina, catedrática de Ética y Filosofía Política de la Universidad de Valencia, ha publicado en El País un interesante artículo relacionado con la lectura que consideramos puede seros de interés,. Por eso lo reproducimos aquí, instándoos a consultar la fuente original.

"Me lo sé, pero no lo sé decir" es una de esas angustiosas expresiones, a medio camino entre la coartada y la sinceridad, que se oye decenas de veces en la escuela. Ante la pregunta elemental cuya respuesta el alumno debería conocer, o al menos eso se supone, responde con esta ancestral muletilla, con la que pretende defenderse de cualquier sospecha de ignorancia. Pero la situación no mejora con eso, porque no saber la lección será malo, pero no saber hablar -o escribir- es mucho peor. La pobre libertad de expresión, tan amenazada ya en los regímenes autoritarios por la malsana tendencia a cerrar medios de comunicación o encarcelar sospechosos, y en los países democráticos, por el peso inmisericorde de lo políticamente correcto, tiene en la incapacidad de expresarse el peor enemigo. El hombre -venía a decir Aristóteles- es un animal social, porque cuenta con un tesoro precioso, la palabra, que le permite deliberar con las demás personas sobre lo justo y lo injusto, sobre lo bueno y lo conveniente. Y esta es la buena vida social, la de aquellos que dialogan sobre sus deseos, sus preferencias, sus valores y tratan de decidir conjuntamente qué les parece mejor. 

Pero ¿cómo puede llevarse adelante este proyecto de vida en común sin, entre otras cosas, saber decir? Podría parecer que en esta nuestra "sociedad de la información" la infinita cantidad de cauces decomunicación, el número apabullante de redes que conectan entre sí todos los lugares de la tierra, nos hasalvado de las limitaciones comunicativas de otros tiempos. Los chats, los blogs, la televisión y la radio interactivas, las TIC que pueblan las aulas escolares y universitarias, por supuesto los correos electrónicos y los teléfonos móviles con su inabarcable cantidad de prestaciones y, por último, pero no en último lugar, el Power Point son medios tan poderosos para conectar a las gentes que la incomunicación entre los seres humanos debería dormir ya el sueño de los injustos. 

Pero ¿es realmente así?, ¿nos comunicamos mejor por eso? No parece. Y tal vez en el fondo de ese fracaso se encuentre, entre otras muchas causas, ese no saber decir, ese descuido del lenguaje, que es un mal endémico.Si atendemos al vocabulario habitualmente usado no solo en la calle, sino en los medios de comunicación y entre los personajes públicos, al Diccionario de la Real Academia Española le sobran miles de términos. Conunos cuantos intentamos arreglárnoslas para expresar tal cantidad de contenidos que el fracaso está asegurado y el intento naufraga en un lenguaje paupérrimo. Caso emblemático es el del verbo "realizar", que lo mismo pretende servir para un roto que para un descosido. 

Como decía hace poco un amigo, acabaremos "realizando" tortillas. No ayuda mucho en este menester el lenguaje de los SMS, tejido de peculiares abreviaturas y "emoticonos", ni la celeridad febril con la que suelen escribirse los mensajes electrónicos. Se redactan a toda prisa, con la misma prisa se envían, y si por casualidad al remitente se le ocurre repasarlos después de haberlos mandado, se le hiela la sangre en las venas ante la cantidad de faltas cometidas, si es que tiene un mínimo desensibilidad ante el asesinato de la lengua. Y no son solo gentes de escasa formación cultural las que llenan defaltas los correos, sino profesores de solera, personas supuestamente cultivadas, alumnos brillantes.Encontrarse con un inadecuado "de que" en el lenguaje oral y escrito, topar con un rotundo "a grosso modo", y enterarse de que la misa fue "de corpore insepulto" son cosas corrientes en la vida cotidiana. 

Claro que con la que está cayendo en materia laboral y económica este descuido del lenguaje parece unanimiedad. En nuestro país es urgente esa reforma estructural de fondo que genere empleo, cuide la sanidad y la educación antes de que sea demasiado tarde, que ya lo va siendo, permita atender a los dependientes, cree riqueza material e inmaterial, tenga en cuenta a los países incapaces de salir de la pobreza por sí solos. Pero lo cortés no quita lo valiente, no se trata de optar ante un dilema, sino de construir una sociedad capaz de cuidar de todos sus bienes con esmero, con delicadeza, con responsabilidad. Saber hablar, saber escribir, saber decir son capacidades básicas. Quienes cuentan con ellas tienen un poder del que carecen los que no saben expresar lo que llevan dentro.

Pero para cultivar esas capacidades es indispensable la formación que viene de la lectura habitual y atenta de buenos libros, viene de una escuela convencida de que se hace un flaco servicio a los alumnos cuando no se les ayuda a cuidar el lenguaje, a saber comprender, exponer, redactar, porque más libres serán de comunicar loque piensan los que manejan el discurso con soltura. Los informes sobre la calidad de nuestra educación nosponen una nota pésima y, por desgracia, no sin razón. Y es que sin duda es malo para una sociedad quemar libros, pero no es mucho mejor no leer los que están en la calle ni es mucho mejor destrozar el lenguaje.

domingo, 27 de marzo de 2011

Revoluciones, evoluciones, involuciones

Todos los comienzos fueron difíciles. La evolución tecnológica siempre tuvo que pelear contra la inercia mental. Evolución y revolución, siempre de la mano.

jueves, 17 de marzo de 2011

Recuerdos de un alumno (El País 17/03/2011)

Josefina Aldecoa 
(La Robla, León, 8 de marzo de 1926 – Mazcuerras, Cantabria, 16 de marzo de 2011)
Recuperamos para nuestros lectores más jóvenes este artículo escrito por MARCOS GIRALT TORRENTE en El País, en recuerdo y homenaje a Josefina Aldecoa, fallecida el 16 de marzo.

Conocí a Josefina Aldecoa en septiembre de 1980, cuando ingresé como alumno en el colegio Estilo para repetir 6º de EGB. En 1980 en España todavía abundaban los colegios en los que sucedían cosas extrañas. En aquel del que yo venía, un colegio público, mi tutor se ponía la alianza entre dos falanges del dedo corazón y atizaba unos capones que picaban y dolían de verdad. Nada así habría sido concebible en los dominios de Josefina. Tampoco el pretencioso encorsetamiento de otros colegios privados que había conocido en mi breve pero errática carrera escolar. A Josefina no había que llamarla de usted, como tampoco a ninguna de las profesoras (todas lo eran, salvo el de gimnasia), y eso a pesar de que habría sido lo más conveniente, ya que las había realmente mayores. A Josefina le bastaba con una mirada para cuadrar a toda una clase de niños. O con abrir de golpe las puertas correderas de su despacho. Era la última instancia disciplinaria del colegio y ejercía su papel con resignación tan bien disimulada que los alumnos tendíamos a ver tan sólo su semblante severo sin darnos cuenta de que el raro oasis que habitábamos era obra suya. La finalidad de un colegio no es hacer felices a los alumnos, pero yo fui más feliz en el colegio Estilo que en cualquier otro de los que conocí. La razón es bien sencilla. Ni nos daban píldoras de la felicidad ni nos sobornaban con regalías. Simplemente percibías que lo que te rodeaba era como debía ser. Todo resultaba razonable, de sentido común. Las profesores eran buenas pedagogas, conocían su asignatura y trataban de enseñarnos más allá de lo que dictaban los romos programas oficiales. Sabían ser flexibles cuando era necesario y nunca se les ocurría representar lo que no eran. 
Las había francamente extravagantes, y con duros historiales de lucha política a sus espaldas de los que sin embargo no hacían ostentación. No nos impartían religión pero sí historia de las religiones; leíamos libros, como los cuentos de Maupassant, en los que ningún ministerio de educación español había reparado hasta entonces pero que nos introducían en la lectura más eficazmente que el canon oficial de la literatura castellana; hacíamos películas; cosíamos (también los chicos) sin que el rubor asomara a nuestros carrillos... Siempre he dicho que mi paso por el colegio Estilo me enderezó y me permitió, algunos años después, alcanzar la universidad. Aprendí que no es refugio la desidia. Se lo debo a Josefina y a las mujeres maravillosas de quienes supo rodearse. Afortunadamente tuve ocasión de decírselo muchas veces. Lo mejor, no obstante, fue contar con su amistad.

Para saber más

    martes, 15 de marzo de 2011

    Aprenderás

    Después de algún tiempo aprenderás la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma, y aprenderás que amar no significa apoyarse, y que compañía no siempre significa seguridad. Comenzarás a aprender que los besos no son contratos, ni los regalos son promesas...

    Aprenderás que con la misma severidad conque juzgas, también serás juzgado y en algún momento condenado.

    Aprenderás que no importa en cuantos pedazos tu corazón se partió, el mundo no se detiene para que lo arregles. Aprenderás que es uno mismo quien debe cultivar su propio jardín y decorar su alma, en vez de esperar que alguien le traiga flores.

    Comenzarás a aceptar tus derrotas con la cabeza alta y la mirada al frente, con la gracia de una mujer y no con la tristeza de un niño y aprenderás a construir hoy todos tus caminos, porque el terreno de mañana es incierto para los proyectos, y el futuro tiene la costumbre de caer en el vacío.

    Después de un tiempo aprenderás que el sol quema si te expones demasiado. Aceptarás incluso que las personas buenas podrían herirte alguna vez y necesitarás perdonarlas.

    Aprenderás que hablar puede aliviar los dolores del alma. Descubrirás que lleva años construir confianza y apenas unos segundos destruirla y que tu también podrás hacer cosas de las que te arrepentirás el resto de la vida.

    Aprenderás que las nuevas amistades continúan creciendo a pesar de las distancias y que no importa que es lo que tienes, sino a quien tienes en la vida y que los buenos amigos son la familia que nos permitimos elegir.

    Aprenderás que no tenemos que cambiar de amigos, si estamos dispuestos a aceptar que los amigos cambian.

    Descubrirás que muchas veces tomas a la ligera a las personas que más te importan y por eso siempre debemos decir a esas personas que las amamos porque nunca estaremos seguros de cuando será la última vez que las veamos.

    Aprenderás que las circunstancias y el ambiente que nos rodea tienen influencia sobre nosotros, pero nosotros somos los únicos responsables de lo que hacemos. Comenzarás a aprender que no nos debemos comparar con los demás, salvo cuando queramos imitarlos para mejorar.

    Descubrirás qué se lleva mucho tiempo para llegar a ser la persona que quieres ser, y que el tiempo es corto. Aprenderás que no importa a donde llegaste, sino a donde te diriges. Aprenderás que si no controlas tus actos ellos te controlaran y que ser flexible no significa ser débil o no tener personalidad, porque no importa cuan delicada y frágil sea una situación: siempre existen dos lados. Aprenderás que héroes son las personas que hicieron lo que era necesario enfrentando las consecuencias. .. Aprenderás que la paciencia requiere mucha práctica.

    Descubrirás que algunas veces, la persona que esperas que te patee cuando te caes, tal vez sea una de las pocas que te ayuden a levantarte. Madurar tiene más que ver con lo que has aprendido de las experiencias, que con los años vividos.

    Aprenderás que hay mucho más de tus padres en ti de lo que supones. Aprenderás que nunca se debe decir a un niño que sus sueños son tonterías, porque pocas cosas son tan humillantes y seria una tragedia si lo creyese, porque le estarás quitando la esperanza. Aprenderás que cuando sientes rabia, tienes derecho a tenerla, pero eso no te da el derecho de ser cruel.

    Descubrirás que sólo porque alguien no te ama de la forma que quieres, no significa que no te ame con todo lo que puede, porque hay personas que nos aman, pero que no saben como demostrarlo. .. No siempre es suficiente ser perdonado por alguien, algunas veces tendrás que aprender a perdonarte a ti mismo.


    Si algo he aprendido en la vida, es que la mentira se pone en contra de quien la inventa.

    Jorge Luis Borges

    lunes, 14 de marzo de 2011

    Caricaturas para pensar

    Cada una de las fotos siguientes encierra pequeña-gran historia y suponen una buena ocasión para reflexionar y pensar en cosas importantes. Dinos qué te sugieren cada una de ellas, añadiendo comentarios a esta entrada.